Pau Aran (Cerdanyola del Vallès, 1981) es bailarín, coreógrafo y profesor de danza, nacido en España y viviendo y trabajando en Alemania desde su juventud. Durante sus estudios en el Conservatorio Profesional de Danza ‘Mariemma’ de Madrid, Pau fue invitado a asistir a la Universidad de las Artes Folkwang de Essen, Alemania. Esto le llevó a su formación más significativa hasta la fecha, en Wuppertal y bajo la dirección de Pina Bausch.
Desde 2013, y en paralelo a las enseñanzas recibidas en sus etapas como bailarín, ha creado sus propias piezas con las que ha bailado en varios países como Alemania, España, Francia, Italia, Chile o Japón. Pau desarrolla la expresión de su arte a través del lenguaje corporal, centrando su trabajo en la creación y pedagogía de la danza contemporánea. La belleza del movimiento y su interés por la poética de la danza contemporánea están bien representados en sus proyectos, creando espacios íntimos donde el público puede respirar y abrir sus emociones, pensando el espacio escénico como un templo para reconectar con nosotros mismos a través del arte.
En 2020 crea la compañía de danza que lleva su mismo nombre para transmitir así los conocimientos que ha reunido a lo largo de su carrera e incorporarlos a su propio trabajo coreográfico. Sintiendo la necesidad de ofrecer y transmitir sus experiencias a la siguiente generación, a la vez que fomentando el auto-descubrimiento de los estudiantes e intérpretes, trabaja y potencia la propia identidad de éstos, adaptando los métodos aprendidos a la nueva realidad. Combinando el paso del tiempo y la fugacidad de la danza, fusionando la herencia y la tradición con el futuro.
La primera creación de la compañía, Lettre d’Amour, fue estrenada en el Grec Festival de Barcelona.
Mi pasión es seguir refinando la forma en que veo el mundo, y afinar la forma en que puedo expresar esto a través de mi propio cuerpo y a través de la colaboración con los demás. Por eso me sumerjo en la diversidad y frecuencia de mis encuentros con otros artistas en el medio de la danza y el movimiento. Para que podamos encontrar formas de comunicarnos entre nosotros y a través de esto sobre nosotros mismos, y el mundo que nos rodea. Esto a su vez crea un lenguaje físico compartido que puede ayudar a construir una sociedad más coherente y sostenible, construida no sobre la pregunta de cómo, sino más bien de qué vamos a hacer como individuos y colectivamente.
Mi experiencia en Alemania con Pina Bausch y su danza-teatro ha influido profundamente en mi camino y ha dado forma a mi cuerpo, pero también quiero reconocer todos los otros encuentros con maestros, aliados y profesores que he tenido hasta este momento.
No quiero aferrarme a lo que se me ha dado y experimentado, sino que siento la necesidad de transmitirlo a mis contemporáneos y a la próxima generación. Con cada propuesta y colaboración deseo comprometerme con un espíritu artístico dispuesto a cambiar y a no perder de vista la búsqueda colectiva más profunda de lo que significa ser humano en este momento.
Os invito a descubrir mi mundo siempre cambiante con la intención de compartir y contribuir a un nuevo paradigma.
¡Bienvenides!